Vieja táctica motivacional de Ramón Díaz, es verdad, pero no deja de generar un revuelo como siempre. Esta es la primera vez que la presenta antes del logro, ahora.... ¿es una jugada maestra para terminar de motivar un plantel que ya tiene todo servido o apresurarse a cantar victoria y correr el peligro que los jugadores se desconcentren?
A mi entender es una jugada brillante para terminar de motivar un plantel que en sólo 6 meses pasó del cielo al infierno, con aparentemente pocos cambios, pero NO.
El primer cambio fundamental es el DT, sin dudas; la dirigencia acertó con su convocatoria y acertó dándole los gustos en sus pedidos. Acertó confirmando a Orión en el arco, impidiendo la venta de Lavezzi a River, con la incorporación de Ledesma y Gastón Fernández y sobretodo motivando a los jugadores y creando una mística que aunque no repitiera los 11 esta siemrpe presente. Con una racha impresionante de local y un esquema un poco más defensivo de visitante, siempre busca ser protagonista y en lo posible jugar por las bandas y por el piso. Es imposible destacar el nivel individual de sólo algún jugadores porque son muchos puntos altos, para nombrar algunos: Orión, Ledesma, Lavezzi, Ledesma, Fernández, Bottineli, Hirsig, Rivero, Silvera, etc.
Obviamente este equipo estuvo acompañado por la suerte (¿del campeón?) desde la fecha 1. Ganó partidos en el último minuto, jugando mal, los reemplazante de las figuras lesionadas anduvieron a la perfección, la inserción de los juveniles fue excelente en momentos oportunos.
Vale la pena hacer la autocrítica y afirmar que yo era uno de los desconfiados en Ramón, de los "inocentes" que creían que el River del 96 lo manejaba cualquiera, porque este último torneo quedo confirmado que la plata (solamente) no gana campeonatos. Larga vida a Ramón en el fútbol argentino, y ahora le queda un reto más grande aún: la Copa Libertadores.
1 comentario:
Simplemente Ramón es una bocanada de aire fresco para el amargo fútbol argentino. Simplemente eso.
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